Por: María Eugenia Yllia, Vanesa Torres y Anne Marie Acevedo (2020)

La última morada que albergó al insigne literato peruano, fue puesta en valor en una intervención que asegura su conservación y la proyecta al futuro, convirtiéndola en un componente esencial de un novedoso diseño museográfico. Por esa razón se consolidaron los muros, así como la estructura del techo de madera y los elementos de carpintería. Además, se adecuaron los usos de las habitaciones de la antigua vivienda, para adaptarlas e incorporarlas al recorrido que requería el guion curatorial, que estuvo dentro de las coordenadas que procuraban mostrar las diversas facetas de Ricardo Palma. Su figura señera en la cultura peruana es detalladamente expuesta, pero sin olvidar su lado íntimo que también lo revela como el ser humano que fue. En suma, se lo puede encontrar allí tal cual era, hasta el extremo que se establece un diálogo con el visitante que admira su obra y desea conocerlo. LEER EL TEXTO